La vida va más rápido que nunca, el río llamado vida tiene sus aguas revueltas y sobre ellas flotan de manera sobresaliente muchas cosas y de diferentes índoles, ya los navegantes de la vida no saben hacia donde mirar, hacia donde dirigir su embarcación, y ni siquiera hay tiempo para pensar en cada uno individualmente, muchos menos por los que están fuera de la barca.
¿Estará cómodo Venus en su visita a Capricornio? La respuesta es NO. Es uno de los signos en donde no hay TIEMPO para pasarla bien en la travesía de la vida; es más, en la actualidad sentimos que este signo es demasiado fuerte, nos mostró la fuerza implacable con la conjunción Saturno Plutón (la Reforma) a comienzos del 2020 y sabiendo que Plutón solo saldrá de ahí hacia el 2024, todavía podemos sentir el rigor de la problemática de vida, en otras palabras, el río está revuelto, y <<a rio revuelto, ganancia de pescadores>>.
Durante estos cuatro meses se notará mucho más la falta de acoplamiento al nuevo estilo de vida, afectando las relaciones interpersonales y con mayor énfasis las sentimentales, permitiendo ver rupturas, amarguras y posturas muy fuertes de combate. Por el otro lado, la economía, desde la visión macro, mostrará una cruda realidad obligándose a imponer reglas y leyes, disque para encontrar una salida a tanta situación de crisis. En lo económico no hay una buena perspectiva, tal vez simplemente morir para renacer, y en ese movimiento, si estamos despiertos lograremos excelentes ventajas, y para eso no podemos dejar las cosas a la “tonta tolondra”, es necesario tomar acción y que sea una acción consciente.